MILÉNICO nace en los márgenes del Duero, en el término de San Martín de Rubiales, entre Roa y Peñafiel, epicentros de la Ribera del Duero, de siempre tierra de viña y cereal, reconocida hoy mundialmente por sus vinos.
Nuestra determinación por conseguir un vino singular e inconfundible nos fuerza a cuidar y atender la viña como una extensión nuestra, y después a elegir solo las mejores uvas para la creación de nuestros vinos. |
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Hemos crecido con la viña y con ella hemos aprendido qué labores nos permiten ser más respetuosos con la naturaleza y a la vez obtener lo mejor de ella.
Con ello conseguimos que el vino sea lo más natural posible y que destaque sus características propias, herederas del suelo, de su variedad y del clima que lo vio nacer. De esta combinación salen series muy limitadas de vinos únicos, auténticos e inconfundibles, fieles reflejos de sus orígenes. |